Después de unos largos meses de invierno vemos que empiezan a retirarse las nubes, el sol resplandece y empiezan a subir los termómetros. ¡Comenzamos a sentir los primeros calores!
Aunque ya estábamos deseando de que llegara el buen tiempo en las zonas donde disfrutamos de tanta luminosidad las viviendas comienzan a notar un importante calentamiento.
Para disminuir el sobrecalentamiento de nuestra casa lo primero que debemos hacer es evitar los efectos de las incidencia de los rayos solares sobre nuestras ventanas y fachadas. Para ello podemos hacer uso de diversas estructuras y sistemas como cortinas, persianas y toldos.
Las persianas debemos dejarlas echadas en aquellos momentos del día en los que la incidencia del sol sea directa sobre nuestra fachada. Igualmente las cortinas deberán estar corridas.
Y qué es mejor con este calor: ¿abrir o cerrar la ventana?
Pues esto va a depender principalmente del momento del día en el que nos encontremos. Así en los momentos más calurosos del día debemos mantener las ventanas cerradas. Esto ocurre entre las 9 de la mañana y las 9 o 10 de la noche. El mayor pico de temperatura en el aire exterior se alcanza sobre las 14:00, pero también son bastante elevadas las temperaturas entre las 11:00 y las 19:00. Por tanto en esos momentos lo más recomendable es mantener las persianas lo más bajas posibles, las cortinas echadas y las ventanas cerradas. Además, en esos intervalos de tiempo la humedad relativa del aire también será baja, por lo que el aire que entre en nuestra vivienda además de subir la temperatura de esta, también disminuirá la humedad del ambiente.
Bien, una vez tenemos claro las horas en las que debemos cerrar las ventanas de casa también debemos saber que el nivel de aislamiento de las ventanas debe ser el adecuado. Para el aislamiento frente al calor son muy recomendables contar con ventanas de aluminio. Las ventanas de aluminio con rotura de puente término (RPT) permiten conseguir un aislamiento superior que con otros materiales, además de que el aluminio presenta una mayor durabilidad.
A partir de las horas de menor temperatura será el momento recomendable para abrir nuestras ventanas y dejar que entre algo de aire a la vivienda. Esto será a partir de las 9 o 10 de la noche hasta aproximadamente las 9 de la mañana.
En definitiva, durante los momentos más calurosos del día debemos mantener las ventanas cerradas para mantener nuestra vivienda bien aisladas del exterior. Para ello es recomendable contar con estructuras y ventanas de aluminio, además de la utilización de persianas, cortinas y toldos.
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